Como mamás lactantes, es natural que nos preguntemos si estamos haciendo lo mejor para nuestros pequeños, especialmente cuando se trata del sueño.
Puede que nos preocupemos por si nuestros bebés duermen lo suficiente o por qué se despiertan con frecuencia durante la noche. Pero hoy quiero invitarte a soltar esas preocupaciones y expectativas, y a confiar en tu bebé y en ti misma.
La arquitectura del sueño de un bebé es muy diferente a la de un adulto. Mientras que nosotros atravesamos largas fases de sueño profundo, los bebés tienen ciclos de sueño más cortos y ligeros. Esto es una parte normal y saludable de su desarrollo. Dormir al pecho, amamantando a demanda, no solo los ayuda a relajarse y a conciliar el sueño más fácilmente, sino que también les ofrece la seguridad y el confort que necesitan durante sus primeros meses de vida.
Amamantar a demanda significa estar disponible para tu bebé cada vez que te necesite, y esto es fundamental para su bienestar emocional y físico. Este contacto frecuente no solo facilita la nutrición y la hidratación, sino que también fortalece el vínculo entre ustedes, favoreciendo un sueño más tranquilo y regulado. Además, la leche materna contiene melatonina, la hormona del sueño, que ayuda a regular los patrones de sueño de tu bebé.
Quiero animarte a disfrutar de este proceso y a soltar las expectativas sobre cómo “debería” dormir tu bebé. Permítete fluir con las necesidades de tu pequeño, confiando en que este es el camino correcto para ambos. La maternidad es un proceso de renacimiento para nosotras también, donde aprendemos a ser más flexibles, a vivir en el presente y a valorar cada momento con nuestros hijos.
Abraza cada despertar nocturno como una oportunidad para fortalecer tu conexión con tu bebé, para nutrirlo y para brindarle el amor que necesita. Este es un tiempo precioso que pasará más rápido de lo que imaginas, y cada momento de cercanía es un tesoro que quedará en tu memoria y en el corazón de tu pequeño.
Evidencia Científica:
- Según el Dr. James McKenna, experto en sueño infantil y lactancia, “el sueño compartido con la lactancia a demanda no solo es natural, sino que es lo que los bebés han experimentado durante milenios. Este patrón de sueño protege a los bebés y los ayuda a regular su respiración y temperatura, disminuyendo el riesgo de síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL)”.
- La Dra. Helen Ball, especialista en sueño infantil, afirma que “los ciclos de sueño corto y ligero de los bebés, combinados con la lactancia materna, promueven un desarrollo neurológico saludable, permitiendo que el cerebro del bebé crezca y se desarrolle de manera óptima”.
- Según la International Breastfeeding Journal, la leche materna contiene triptófano, un aminoácido que el cuerpo convierte en melatonina, ayudando a los bebés a desarrollar patrones de sueño más regulares y tranquilos”.
- El Dr. Nils Bergman, investigador en neurociencia del desarrollo, destaca que “el contacto piel con piel durante la lactancia a demanda no solo mejora el sueño del bebé, sino que también reduce el estrés en la madre, lo que facilita la producción de leche y fortalece el vínculo afectivo”.
- La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda “la lactancia materna a demanda como un factor clave para el desarrollo saludable del bebé y el fortalecimiento del vínculo madre-hijo, ayudando a establecer patrones de sueño más regulares y a disminuir el riesgo de problemas de salud a largo plazo”.
- La Dra. Kathleen Kendall-Tackett, psicóloga y especialista en lactancia, señala que “la lactancia materna a demanda es esencial para el bienestar emocional del bebé, ya que satisface sus necesidades inmediatas y promueve un sueño más tranquilo, ayudando a establecer una base sólida para el desarrollo emocional y cognitivo”.
Finalmente, quiero invitarte a vivir este proceso con gratitud y a abrazar cada día como una nueva oportunidad de reinventarte y de soltar el control.
La maternidad nos enseña a estar presentes y a confiar en lo que somos capaces de hacer. A medida que amamantas a tu bebé, estás construyendo un vínculo irrompible y dándote la oportunidad de crecer junto a él.
Agradece cada momento, incluso los desafíos, porque ellos te están transformando en la madre que tu bebé necesita. Vive un día a la vez, fluyendo con lo que la maternidad te trae, y descubre la belleza de este viaje único y lleno de amor.