Inmediatamente después del nacimiento de nuestros bebés, las mujeres atravesamos muchos cambios físicos, hormonales, emocionales y energéticos. Estos cambios pueden realmente desequilibrarnos haciéndonos sentir tristes y hasta abrumadas.
Junto con las nuevas responsabilidades que hemos adquirido de cuidar y criar a un bebé, la falta de sueño y el cansancio se acumulan llevándonos a un estado conocido como: baby blues o tristeza puerperal que afecta alrededor de un 85% de las madres en el postparto.
Los síntomas más comunes son:
- Tristeza
- Ganas de llorar o llanto espontáneo
- Ansiedad
- Miedo o nerviosismo
- Cansancio extremo
- Falta de energía
- Y alteraciones del sistema digestivo
El estrés psicológico y emocional que sufrimos las madres en el postparto y el ideal de la maternidad que nos ha construido la sociedad, son los factores principales que incrementan los síntomas del baby blues.
Para superarlo idealmente, podemos construir un entorno saludable que nos brinde apoyo y nos permita descansar en contacto piel con piel con nuestro bebé, para llenarnos de oxitocina y endorfinas y así equilibrarnos en esta compleja etapa de transición.
Recuerda que convertirnos en madres es una maravillosa oportunidad para reinventarnos y el apoyo marca la diferencia.
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Dra. Marianela Hernández Chaves
Mamá & directora de Medilacta Asesores Especialistas
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