Es natural que los bebés y niños pequeños tengan cierto número de despertares nocturnos, más si se está disfrutando del proceso de amamantamiento. Recordá que la leche materna no es únicamente comida, y la misma juega un papel fundamental en el proceso de conciliación del sueño y maduración de las funciones cerebrales.
Mientras más tiempo pase el papá con su bebé, más se desarrolla el vínculo que le permite tener un instinto natural de protección.
Los niños son como las semillas y brotes de las plantas, con su inmensa capacidad de expansión y su elevado nivel de consciencia tienen la maravillosa habilidad de estar en calma ante situaciones de estrés.
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Trabajando desde la casa con bebés y niños tenemos esta hermosa oportunidad de buscar alternativas divertidas para hacer en familia, que contribuyan al aprendizaje de los más pequeños y a ayudarles a canalizar su energía.
Hoy quiero darte algunas recomendaciones para que puedas hacerle frente al aislamiento y las nuevas rutinas familiares durante esta pandemia
